“La historia de Trujillo la escribimos todos, con nuestros actos”, dijo el alcalde Mario Reyna.
En el mensaje central por el 205° Aniversario de la Independencia de Trujillo del yugo español, el alcalde provincial Mario Reyna Rodríguez destacó y reconoció el valor de los precursores de la patria, que pusieron en riesgo no solo su libertad, sino su vida, la de su familia y patrimonio por defender la nueva causa de libertad.
“Escuchar la narración de los hechos históricos es impresionante. Es complicado subvertir a un régimen y sobre todo a un régimen de aquel entonces que no brindaba las garantías mínimas para poder defenderte”, manifestó.
Fue después de oír al historiador de la UNT, Frank Manuel Díaz Pretel, en el discurso de orden, recordando los hechos que llevaron a la declaratoria de nuestra independencia.
Tuvo que haber sido una escena dramática y difícil, subvertirse al régimen hegemónico español, porque estabas poniendo de por medio no solo tu libertad sino tu vida, tu familia y tu patrimonio por una nueva causa, una nueva bandera, un nuevo sueño, el sueño de ser independiente, seguramente imbuidos por las corrientes libertadoras de otros países de América o por la corriente del nuevo pensamiento, dijo.
Entonces, no solo se hablaba de un nuevo régimen económico o social, era una nueva forma de ver el mundo. Ya no era el emperador, no era el rey, no era el hijo de Dios sino era un hombre elegido por los hombres. Las ideas de libertad y de democracia de entonces fueron un golpe durísimo que llegó a nuestra ciudad, pero ahí estuvieron figuras importantes, añadió.
Los precursores libertarios pusieron en riesgo su vida y la de su familia y sus bienes para empezar un nuevo capítulo en la historia y un segundo capítulo importantísimo en lo que va de nuestra ciudad, que bien sabido es fue de fundación española y ya estamos en 490 años de fundación, pero solo 205 de independencia, señaló.
Creo que fue una nueva forma de ver el mundo y al Perú. Se pensó que podemos administrarnos de mejor forma, mucho más eficiente y justa; y en la historia de las ciudades 205 años no es casi nada, son las páginas iniciales de un libro muy bonito, de una historia muy bella que se llama Trujillo y que la escribieron los que nos antecedieron y que seguimos escribiendo nosotros con cada uno de nuestros actos y será herencia para futuras generaciones, enfatizó.
Quiera Dios que mañana más tarde se hable de una ciudad que no solo dio su grito de independencia, sino que también aprendió de sus errores, de sus prejuicios y aprendió a entenderse y a ser mucho más humanos, exhortó Mario Reyna.
En la parte final de su alocución el burgomaestre reveló su esperanza en que Trujillo sea una mejor ciudad para nuestros hijos y nietos y que sea mucho más noble, inclusiva y solidaria. “Trujillo fue grande desde fundación, fue grande por su independencia y seguirá siendo grande por el esfuerzo de todos nosotros y todas nuestras generaciones, feliz aniversario”, remarcó.
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